domingo, 5 de agosto de 2012

La buena mesa


Hoy en día el protocolo forma parte básica de nuestra sociedad - desde los buenos modales - protocolo social - hasta normas de protocolo en situaciones más formales. Saber cómo actuar o vestirnos según la situación es muchas veces el primer paso para lograr que los demás tengan una buena impresión de nuestra persona.



Poner de forma correcta una mesa es tan importante como que la comida esté buena y que el ambiente sea el mejor
     - Cómo poner la mesa-
La mesa debe ser labor de los anfitriones, y por supuesto, debe estar puesta antes de que lleguen los invitados.
Si la comida, o cena, fuese informal, no hay problema en que los invitados lleguen cuando no esté puesta la mesa o incluso que colaboren con los anfitriones poniéndola.
     - Mantel, servilletas y centros de mesa
El mantel y las servilletas deben ir a conjunto.
El mantel deberá cubrir toda la mesa, es decir, los mantelitos individuales los descartamos y las servilletas que hagan juego con el mantel, por lo menos que sean lo más parecidas posibles.
Las servilletas se colocarán a la derecha del plato y dobladas en rectángulo, aunque se permite la posibilidad de ponerlas a la izquierda del plato o incluso sobre este. En todo caso, evitaremos colocarlas en los vasos.
Los centros de mesa deberán ser elegantes, sencillos y con gusto. Una mesa demasiado cargada de adornos no es delicada y centros de mesa muy altos dificultan las conversaciones entre los comensales y sobre todo dificultan el campo de visión en una mesa, por lo que deberán ser de una altura no muy elevada. Un centro floral siempre es una buena idea, ya que las flores siempre son signo de gusto.

     - Platos, vajilla-
Los platos es un tema que se extiende más de lo que uno se puede llegar a imaginar.
Para empezar, todos y cada uno de los platos que vayamos a utilizar deberán ser de la misma vajilla, nunca mezclaremos dos vajillas diferentes. Esta regla merece una excepción, los platos de postre y de pan sí se permite que sean distintos.
Otra regla importante será la que nos dice que nunca deberemos utilizar un mismo plato para comer el primer y el segundo plato.
Una vez dicho esto, los platos de colocan de la siguiente manera:
Porta platos: plato decorativo, que nunca se quita de la mesa y que tampoco se le da ninguna utilidad. Sólo se retirará una vez que vayamos a servir el postre.
Platos hondos: si hay sopa (o consomé, crema…), deberemos colocar este plato encima del plato llano y una vez terminado el primer plato, se comprobará si el llano se ha ensuciado o no. En caso afirmativo, se cambiará el plato llano sucio por otro limpio.
Platos llanos: a uno o dos centímetros del borde de la mesa. Nunca poner un plato llano sobre otro plato llano. Será el segundo plato que se utilice.
Platos de pan: se colocarán a la izquierda del plato llano, a la altura de las copas.
Platos de postre: únicamente se colocan cuando los platos llanos se hayan retirado y se vaya a dar paso al postre.
     - Cubiertos-
No es tan difícil como parece, aunque parezca que debamos estudiar una carrera para saber que cubierto es el que hay que coger con tantos como nos podemos encontrar en una mesa formal, al fin y al cabo, responde a una regla muy sencilla, que bastará tenerla clara para que no nos volvamos a hacer tantos líos. " Iremos cogiendo cubiertos desde el exterior hacia el interior", es decir, los últimos cubiertos que utilizaremos serán los que estén más cerca del plato. En consecuencia, los cubiertos de colocarán de la siguiente manera:
Tenedores: en la parte izquierda del plato y se colocan dos tenedores, con las puntas hacia arriba. Se utilizarán siguiendo la regla arriba señalada.
Cuchillos, cucharas y palas de pescado: a la derecha del plato. Siguiendo la regla, quedarían así: la cuchara, con la parte cóncava hacia arriba y la más alejada del plato, luego, la pala de pescado y seguidamente el cuchillo con el filo hacia dentro.
Cubiertos de postre: si la cena es muy formal, los cubiertos de postre de colocarán una vez retirados los demás cubiertos, es decir, cuando se haya terminado con la comida y vaya a procederse al postre. En una cena informal, se colocan al mismo tiempo que los demás cubiertos y arriba del plato. El tenedor lo pondremos con el mango hacia la izquierda y será el más cercano al plato, la cuchara con el mando hacia la derecha y más alejada del del plato.
Por supuesto, ningún cubierto debería ser ni de madera ni de plástico.
     - Vasos y copas-
Limpieza y en buen estado
son las dos notas que hay que resaltar, puesto que puede arruinarnos la imagen de nuestra mesa un vaso sucio, no transparente o con rajas.
En una cena formal no utilizaremos vasos, estos los dejamos para las cenas informales y destinadas al agua.
En una cena formal, el agua también se servirá en copa, la más grande de todas y deberá estar llena, pero no a rebosar, incluso antes de que los invitados tomen asiento. Luego dispondremos de una copa para el vino.
Vino blanco: copa alargada y esbelta y sírvase frío.
Vino tinto: copa de contornos redondeados y a temperatura ambiente.
Su lugar en la mesa nos da distintas opciones:
A la derecha del plato en escala de mayor a menor y de izquierda a derecha.
Frente al plato, después de los cubiertos de postre, si es que los hay (cena informal).
     - Cómo sentar a los comensales-
En este apartado deberemos tener en cuenta la forma de la mesa, la edad de los invitados, el tipo de cena, su rango social, etc.
En todo caso, los anfitriones deben arropar a sus invitados y deben sentarlos de tal manera que no se formen grupos de dos o tres personas.
Evitaremos juntar parejas con parejas, o poner a gente con edades muy diferenciadas juntas.
Sí procuraremos que los anfitriones de la casa sean los que presidan y las personas de mayor rango vayan a su izquierda y del sexo opuesto.

      Fuente :
- Varios.


Saludos.
Burt Minorrot